EL DIARIO ÍNTIMO DE MIGUEL DE UNAMUNO
Unamuno es, quizás, uno de los autores más autobiográficos de su época, aunque la mayoría de sus obras no sean stricto sensu obras autobiográficas. Todos los trabajos del gran escritor vasco constituyen, de hecho, unas variaciones sobre un mismo tema, a saber, el de la personalidad, la individualidad y su relación agónica con la Divinidad. Si entre sus obras narrativas –que son verdaderos relatos autobiográficos en que el autor monta “versiones posibles o imposibles, ortodoxas o heterodoxas sobre la identidad de la individualidad de su ego”– destaca, por su valor autobiográfico, la novela San Manuel Bueno, mártir (1931), el verdadero laboratorio de sus ideas se encuentra en el Diario íntimo que, junto con Recuerdos de niñez y mocedad y Cómo se hace una novela, forma una suerte de trilogía autobiográfica, bajo el perfil tanto de la forma como del contenido.